martes, 30 de diciembre de 2008

Religión



Mis ojos cargados de atardeceres.
Miles.
Cada uno tan hermoso y distinto a los demás.
Mis labios gastados de besos, de susurros.
Mis dedos música, dedos poesía, amor.
Tocando, escribiendo, abrazando a los que no pueden, a los que mueren.
A los que mueren viviendo, o viven muriendo.
La soledad puede ser tan hermosa, solamente si la elegimos, si hay otra opción.
A veces pienso que nada más me entienden el sol y las nubes cuando hacen el amor.
O los árboles, felices de vivir y nada más.
El paraíso está acá, en este frescor, en las hojas, en el olor a tostadas a la mañana, en los cuerpos apretados. La gente lo busca en algún lugar prometido y ajeno.
Está en cada pupila, en cada ombligo.
Dios entra en un abrazo.

viernes, 26 de diciembre de 2008

El rey


Ahí estaba el rey en su silla.
Toda su vida había vivido en ella.
Era cómoda, estaba acostumbrado.
Pero pasó el tiempo, y deseaba levantarse y caminar.
Pero era inadmisible, un momento de descuido y alguien podría sentarse en su lugar.
Pasó otro tanto, y un día quiso salir a mirar las estrellas.
Pero hay tanta gente horrible en el mundo dispuesta a sacarle la silla a un viejo.
En otra ocasión, tuvo ganas de sentir la brisa en la cara.
Pero quien iba a cuidar su trono?
Se quedó sentado, al fin.
Y pasó el tiempo, hasta que el rey murió.
Murió solo, en su trono, acompañado únicamente de sus tantas medallas conmemorativas y su corona , sentado en su cómoda, tan cómoda silla.

lunes, 22 de diciembre de 2008

No es en el espacio donde debo buscar mi dignidad como ser humano, sino en el ordenamiento de mi pensamiento. No tendría ninguna ventaja poseyendo tierras: por medio del espacio el universo se apodera de mí y me devora como a una mota de polvo; por el pensamiento me apodero del universo.

Blaise Pascal (1623-1662)

viernes, 19 de diciembre de 2008

Poder


El poder es una ilusión.
Un gobernante, un político, un rey, no controla nada.
Controla a un montón de gente, si. Como cualquiera de nosotros puede controlar a las hormigas, o matar millones de células de un pisotón. Pero no controlamos nada.
Un rey no controla que crezcan nuevos brotes en la tierra que destruyó.
No controla las mareas, los huracanes, el fuego, el viento.
Las montañas se erosionan y nadie puede evitarlo.
Ni siquiera nuestros cuerpos son reales, fijos. Las células que los componen van rotando, cambiando. Hoy somos algo distinto que ayer o mañana. No somos algo estático, estamos en movimiento con el resto del universo. Mis células mañana pueden ser las del rey. Ël y yo somos lo mismo, pero no logra entenderlo.
El ser humano es un pestañeo en la historia del cosmos. Somos un segundo, una partícula en el universo. Nadie puede controlar todo.
Por más que trate, nunca va a poder controlar el espíritu de la gente, el amor de la gente.
Ninguna corona, ningún uniforme puede hacer que alguien ame o deje de amar.
Su poder es un instante en el cosmos. Es una mota de polvo en el espacio. No existe.
Está destruyendo millones de seres, creando miseria y tristeza, por algo falso. Por algo pasajero, ínfimo, diminuto.
Y se está condenando a él mismo a vivir y morir en soledad, por algo que no es real.
Se está matando a él mismo. Condenado a proteger su reino ilusorio de enemigos ilusorios.
Sus pilas de oro le impiden ver como la felicidad, el amor, la vida le pasan por el costado.
Cambia su felicidad por una ilusión.
Pobres reyes, pobres soldados, pobres ricos.
Pobres poderosos.

jueves, 18 de diciembre de 2008

El pueblo unido

Muchachos, tenemos que unirnos.
Entender que ideología no es sectarismo.
Todos gritan que el pueblo unido jamás será vencido.
Pero todos quieren que el pueblo se una bajo su bandera. Eso nunca va a pasar.
El pueblo - por suerte - nunca va a ser homogéneo.
Siempre va a haber gente que piense diferente, y distintos grupos con distintas posturas.
Es importante mantener esas posturas, pero es importante debatirlas, ponerlas en duda también, saber que la única verdad absoluta es que la verdad absoluta no existe.
Que mientras nos peleamos entre nosotros, los de arriba se reparten la torta.
Entonces, para un progreso de la humanidad es imprescindible el diálogo.
Impedir que nuestras diferencias no nos dejen ver nuestras coincidencias.
Yo puedo ser anarquista, pero eso no quita que pueda hacer cosas con peronsitas, marxistas o católicos.
Porque a todos nos une lo mismo: buscamos la liberación de la humanidad y la felicidad de las personas, de todas, en todos los ámbitos.
Todos tenemos teorías sobre caminos distintos, eso está claro.
Ahora, históricamente se demostró que cerrarse en un camino y no aceptar otra forma de vista, termina por aislar a los movimientos y alejarlos del pueblo. Basta agarrar un libro de historia, de análisis político.
No hay que suponer qué quiere el pueblo. Hay que ir a preguntárselo, ser el pueblo.
Entonces, primero nos tenemos que concentrar en cambiar las estructuras de poder, de economía y culturales. Dialogar y darnos cuenta que juntos podemos realmente cambiar las cosas.
Una vez que cumplamos nuestros objetivos en común, empezamos a discutir nuestras diferencias. Pero es necesario ser flexible y aceptar otros puntos de vista.
El pueblo es heterogéneo y multicultural, multiclasista y con diversas ideologías y posturas políticas.
Y siempre va a ser así.
La única manera de unir al pueblo es ver qué tienen en común esas personas. El amor al prójimo. Las ganas de cambiar.
Y ver qué caminos podemos construír juntos, que puentes tender.
No es solamente una victoria política pasajera. Es generar una cultura de diálogo, de hermandad. Comprender que tenemos la capacidad de unirnos a pesar de nuestras diferencias. Por nuestras coincidencias.
Saber que todo el tiempo nos tratan de dividir, nos educan para que nos autodividamos, porque nos tienen miedo.
Tienen terror a que nos pongamos de acuerdo.

Un abrazo gigante a todos mis hermanos que luchan por un mundo mejor.
Me da igual de donde sean, no hay distancia, no hay fronteras.

martes, 9 de diciembre de 2008

'De ahí que la condición del trabajador es lo más inestable, no considerándolo sino como un medio, menos importante que la máquina y que la bestia, porque estás tienen un precio de compra, son un capital que es preciso conservar, mientras que si un hombre se pierde, se repone con otro, que no cuesta dinero'

Juan Bialet Massé denunciando las condiciones de trabajo en el gobierno de Roca.

En algún momento subo todo el texto.

Por una módica suma


http://www.tierralunar.com/


Esta vez les resultó más fácil que en américa o en áfrica. No tuvieron que echar a nadie para repartírsela.

La verdad, no lo puedo creer....en serio.
Dentro de poco nos van a cobrar por mirarla.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Arte al paso


Dicen que hay un tal Sebastián.
Que va en carreta por el mundo regalando arte.
Para en cada pueblito. Pueblitos de chicos que nunca vieron títeres, teatro, música. Pueblitos a los que nadie va, capaz desde que los trenes son recuerdo.
Y va, y le regala arte y amor a toda la gente que la gran ciudad dejó ahí atrás, en el galpón escondidita hace muuuucho tiempo.
Decidió darle su vida a un montón de desconocidos, olvidados.
Amarlos nada más por existir.
¿Quién dijo que la magia no existe?



http://www.artealpaso.com/


Gracias por la magia loco! =)



ACLARACIÓN: me están firmando mucho preguntándome por arte al paso, o pensando que yo tengo alguna relación con sebastián.
Más allá de la relación afectiva que tengo simplemente por ser la persona que es, no tenemos un trato personal.
Lo fuí a ver y le escribí un poema nada más.
Para hablar con él escríbanle en la página de arte al paso.

www.artealpaso.com

Un abrazo

jueves, 4 de diciembre de 2008

Un grito desesperado


Un loco que les dice que amen, que se olviden de todo lo que les enseñaron y amen.
Un abrazo que no somos tan diferentes indiferentes.
Ese beso que hace que todas mis mentiras se vuelvan verdades.
Esos ojos pura verdad.
Esas muertes para caminar sin parar.

martes, 2 de diciembre de 2008

Cita de Bakunin

El trabajo individual ya no será pues posible sino en la producción intelectual, en las obras del espíritu. ¡Y aún! ¿Acaso el espíritu del mayor genio de la tierra no es siempre el producto del trabajo colectivo, intelectual tanto como industrial, de todas las generaciones pasadas y presentes? Para convencerse de ello, imaginemos al mismo genio, trasladado desde su más tierna infancia a una isla desierta. Suponiendo que no se muera de hambre, ¿qué será de él? Un animal, un zafio que ni siquiera sabría pronunciar una palabra y que por consiguiente nunca habría pensado. Trasladémosle a la edad de diez años, ¿qué será unos años más tarde? Un bruto otra vez, que habrá perdido el hábito de la palabra y que sólo habrá conservado de su humanidad pasada un vago instinto. Trasladémosle por fin a la edad de veinte años, treinta años, tras diez, quince, veinte años de distancia, se volverá estúpido. ¡Quizás inventará alguna nueva religión!

lunes, 1 de diciembre de 2008

La humana inmensidad


Ernesto hermano.
Amigo de fotos, de historias.
Tu mirada corazón
Tus manos martillo y fusil, o a veces
Tu estrella sigue significándome tu estrella
Tu cara sigue siendo cara, no remera.
Libertad o muerte, otra no queda.
Ay, mi humano comandante, mi comandante de lo humano.
Hasta las victorias, si, siempre.