deja vus
de ígneos pasados
hoy desenfundan
su ronca voz;
gritos volcán
tristes puños de tundra atardeciendo
acariciando mi cobarde pecho
arroyo seco donde se muere de sed
callos de piedra para la espalda mutilada
grito espanto
queriendo llenar el cuenco,
sembrar el maizal
lunes, 7 de febrero de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario